Muro, ubicado en la llanura norte de Mallorca, es un pueblo que fusiona la serenidad de la campiña con la rica herencia histórica de la isla. Rodeado de tierras de cultivo y a poca distancia de la costa, Muro ofrece una experiencia auténtica en el corazón de la naturaleza mallorquina.
El casco antiguo de Muro presenta estrechas calles adoquinadas y casas de piedra encaladas que cuentan la historia del pueblo. La Iglesia de Sant Joan Baptista, construida en el siglo XIII, se erige como un emblema de la arquitectura gótica mallorquina. La Plaza de la Iglesia es un punto de encuentro animado, especialmente durante festividades y eventos culturales.
Muro tiene raíces que se remontan a la época talayótica, como evidencian los yacimientos arqueológicos en los alrededores. Durante la Edad Media, el pueblo experimentó un florecimiento económico gracias a la agricultura y el comercio, marcando su identidad hasta el día de hoy.
La tradición agrícola de Muro se refleja en la Feria de la Sandía, un evento que celebra la producción local y atrae a visitantes con degustaciones y actividades festivas. Además, los alrededores de Muro ofrecen oportunidades para explorar la naturaleza, con rutas de senderismo y ciclismo que revelan paisajes pintorescos.
Con su ubicación estratégica, Muro permite acceder fácilmente a las hermosas playas del norte de Mallorca, como las de Can Picafort y Alcúdia. La hospitalidad de sus residentes y la conexión con las tradiciones locales hacen de Muro un destino que cautiva a aquellos que buscan una experiencia genuina en la isla.